Buenos Aires, 15/05/15 (Voz Sahara Occidental Argentina)
El pasado jueves 14 de mayo se presentó en Buenos Aires el documental “La Güera”, mi pueblo olvidado”, de los realizadores italianos Fiorella Bendoni y Gilberto Mastromatteo, quienes estuvieron presentes en la proyección que tuvo lugar en el Auditorio Eva Perón de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE-CTA), en el marco de la jornada “La Causa Saharaui: 40 años de injusticias y resistencias”, organizada por la central sindical con la colaboración de la Cátedra Libre de Estudios sobre el Sahara Occidental (Instituto de Relaciones Internacionales, Universidad Nacional de La Plata) y el Comité de Amistad con el Pueblo Saharaui de la República Argentina.
El panel central estuvo integrado por los directores del documental, acompañados de Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora; Carolina Ocar ySilvia León (ambas dirigentes de ATE-CTA, recién llegadas de los campamentos de refugiados saharauis) y el representante del Frente Polisario en la República Argentina,Salem Bachir.
Carolina Ocar dio la bienvenida agradeciendo especialmente a los presentes y destacando que la actividad fue parte “del compromiso tomado en los campamentos con los compañeros y compañeras saharauis sobre que, al regreso de nuestra participación en el VII Congreso de la Unión Nacional de Mujeres Saharauis, íbamos a hacer una devolución de toda la experiencia vivida contribuyendo a la difusión de la causa, no solo en nuestro país sino en el resto de América Latina, como ellos y ellas nos pidieron”.
Tras la apertura, Salem Bachir realizó una introducción a la temática del documental, explicando la situación jurídica y política de La Güera, en el marco de la ocupación marroquí y el enfrentamiento armado entre Marruecos, Mauritania y el Frente Polisario a partir de la invasión del territorio saharaui.
Luego de la proyección del documental, tomó la palabra Nora Cortiñas, recordando que acaba de asistir al FiSahara 2015, cuyo tema central fue la justicia universal. “Pude ir a ver el muro con el que Marruecos tiene sitiado al pueblo saharaui que es una infamia mundial, con la indiferencia de los países que se llaman civilizados; son 2.700 kilómetros de muro que tiene diez millones de minas antipersonales colocadas adentro y afuera además de haber separado a las familias… ninguna familia puede juntarse porque pobre del que salte para un lado o para el otro… es gravísimo”, señaló Cortiñas, quien leyó algunas de las frases que se depositaron en el muro en el marco de la campaña Por cada mina una flor, destacando luego a Voz del Sahara Occidental en Argentina que esa iniciativa es una gran oportunidad “para que todo el mundo se entere y para que luchemos por un Sahara Libre; ese tiene que ser el compromiso nuestro; hay que exigir que se les permita tener un referéndum y que puedan determinar qué gobierno quieren y que sean libres para elegir cómo quieren vivir: eso es la solidaridad y ese es el camino”. En el mismo sentido, la Madre de Plaza de Mayo hizo hincapié en la necesidad de exigir al gobierno argentino que se pronuncie en favor de la libertad y el respeto por los derechos humanos del pueblo saharaui.
Seguidamente, Fiorella Bendoni se refirió a la gran tarea que realiza en Sesto Fiorentino (Italia) la Asociación Ban Slout Larbi, que abarca hermanamientos de ciudades italianas con wilayas de los campamentos de refugiados, envío de ayuda humanitaria y acogida de niños durante el período estival (similar a lo que en el Estado español se realiza bajo el nombre de “Vacaciones en Paz”), entre muchos otros trabajos orientados a la obtención de la libertad del pueblo saharaui. Cabe destacar que Fiorella no necesitó traductor ya que, hablando en italiano, el público comprendió perfectamente su mensaje: sin dudas, además de la gran voluntad de comunicación que existía en la sala, la fuerte herencia italiana en la sociedad argentina jugó un papel central.
Por su parte, Gilberto Mastromatteo habló (en un muy buen castellano) sobre la relación existente entre el tema central del documental y el marco general, afirmando que “La Güera es una ciudad que está enterrada y el Sahara Occidental es un problema que también está enterrado porque, si bien la comunidad reconoce el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación y a tener su tierra, después de cuarenta años la situación es igual, por eso La Güera nos parece el símbolo más alto de lo que pasa”, añadiendo que “la comunicación es importante, porque el arma más grande que tiene Marruecos en este momento es el silencio: hay un bloqueo mediático muy fuerte sobre la situación del Sahara Occidental que ellos hacen con el compromiso de otros países como Francia y que tiene a los saharauis en una situación de completo silencio; por lo tanto, todos los esfuerzos que se hagan para hablar de esta temática son buenos”.
Luego de las palabras del realizador, Silvia León y Carolina Ocar brindaron detalles de su participación en el VII Congreso de la Unión Nacional de Mujeres Saharauis y explicaron que, más adelante, realizarán una muestra fotográfica itinerante por el país (algunas de las imágenes tomadas en los campamentos acompañaron los momentos previos al inicio del encuentro en ATE, mientras se disfrutaba de la música de la enorme Mariem Hassan) y elaborarán un video con las entrevistas realizadas en los campamentos de refugiados.
Tras ello, se realizó una ronda de preguntas y comentarios con el público. Entre los presentes se encontraban altos dirigentes de ATE como el secretario general adjunto,Hugo Godoy; Julio Santucho, director del Festival Internacional de Cine de Derechos Humanos; Nora Podestá y Salvador Hassan, del Comité de Amistad con el Pueblo Saharaui de la República Argentina; Luz Marina Mateo, secretaria de la Cátedra Libre de Estudios sobre el Sahara Occidental y el docente invitado Jorge Alejandro Suárez Saponaro; varios integrantes de asociaciones de derechos humanos y sindicatos, así como docentes y estudiantes de distintas áreas. También se contó con la presencia de público proveniente de Uruguay, Brasil, Costa Rica y Francia.