30 de diciembre, 2014 – porunsaharalibre.org
El padre de Naama Asafari, el señor Abdi Moussa Asfari fue uno de los muchos ex-desaparecidos saharauis. Estuvo preso 16 años en la cárcel secreta de Mguna, víctima de malos tratos, torturas y hambre a manos de las autoridades marroquíes desde 1976 hasta 1991
En los más de 5 años de prisión ilegal de los presos de Gdaim Izik ya son varios los familiares cercanos que mueren, sin que sus hijos o hermanos puedan despedirse de ellos ni participar en los funerales.
Esto viola claramente los artículos del standard mínimo con respeto a los presos de las Naciones Unidas
Generaciones de saharauis sufren debido al silencio de la comunidad internacional y la complacencia de las Naciones Unidas que no implementan las resoluciones aprobadas para la realización del referendo de la autodeterminación.