Por: Ricardo Sánchez Serra / fpp.org.pe
Marruecos es condenado por todas las organizaciones de derechos humanos del mundo por realizar genocidio étnico y cultural y torturas contra los saharauis en el territorio invadido del Sáhara Occidental señaló Ricardo Sánchez-Serra, presidente del Consejo Peruano de Solidaridad con el Pueblo Saharaui (COPESA).
Fue durante la conferencia que brindó, en el auditorio de la Federación de Periodistas del Perú, ante un grupo de líderes juveniles y coordinadores de universidades y gremios, que destacaron últimamente por la organización de marchas pacíficas en la capital peruana contra el régimen laboral juvenil, así como frente a la llamada “televisión basura”.
“Marruecos es el más grande violador de los derechos humanos en el mundo. Todos los días meten preso a los saharauis y los torturan. Expulsan a veedores de derechos humanos, eurodiputados y periodistas que no le son afines, ante la pasividad e indiferencia internacionales”, dijo Sánchez Serra, agregando que “me dirijo a ustedes jóvenes invitándolos a que expresen su solidaridad con el pueblo saharaui en todas las formas, incluso manifestándose pacíficamente frente a la Embajada de Marruecos”.
Sobre el muro que construyó Marruecos en el Sáhara Occidental con ayuda francesa y de Arabia Saudita expresó que “viola las normas internacionales por cortar el territorio y separar familias. Es la cárcel más grande al aire libre y el muro militar más largo del mundo con 10 millones de minas y vigilado por 120 mil soldados, radares y artillería pesada.
De otro lado, se mostró extrañado por la lentitud en que actúa el gobierno peruano frente al espionaje de Marruecos “el segundo más importante luego del chileno, porque la cancillería de Rabat tenía documentos de la cancillería y congreso peruanos”, aseveró.
Mencionó que el hacker “Chris Coleman” dejó al desnudo todas las artimañas y suciedad de la diplomacia marroquí “sobornando a periodistas, político e intelectuales, comprando sus conciencias, para atacar a Argelia y al Frente Polisario, legítimo representante del pueblo saharaui reconocido por las Naciones Unidas y además corrompiendo a funcionarios de la ONU, espiando al Secretario General”, detalló Sánchez Serra, enseñando documentos en el que sobornaban a intelectuales peruanos pagándoles 2,200 dólares, además de viajes a Marruecos con todo pagado a políticos y congresistas “que se han vendido a Marruecos por un plato de lentejas. ¡Es una vergüenza!”, opinó el presidente de COPESA.
