Chahid El Hafed, 31/07/15 (SPS)
El gobierno de la República Saharaui ha expresado este jueves su más rotunda condena a lo que llama el rey de Marruecos “regionalización ampliada” en un intento de alterar el marco o estatus jurídico, político y demográfico del territorio, además de considerarse una flagrante violación del derecho internacional, según un comunicado del Ministerio de Información de la RASD.
Para el gobierno saharaui, el contenido del discurso del rey de Marruecos de este 30 de julio de 2015 refleja la intransigencia y retoma las viejas y habituales políticas de potencias coloniales de la época.
“Las resoluciones de las Naciones Unidas a este respecto son claras e inequívocas, el Sahara Occidental no es marroquí y nadie reconoce la soberanía del Reino sobre ella, por tanto la presencia de Marruecos, es de ocupación militar ilegal”, señala el comunicado al que SPS pudo acceder.
“Marruecos saquea los recursos naturales saharauis de forma ilegal, practica las represiones, malos tratos y las graves violaciones de los derechos humanos contra los ciudadanos indefensos, impone un bloqueo y rechaza la presencia de observadores internacionales en el territorio, además de la presencia del muro militar marroquí, un crimen contra la humanidad que divide el territorio del Sáhara Occidental y al pueblo saharaui”..
El comunicado subraya que no existe otra solución al contencioso entre el Reino de Marruecos y el Frente Polisario, único representante legítimo del pueblo saharaui, que no respete plenamente la voluntad del pueblo saharaui a la libre determinación y la independencia, a través de un referéndum libre, justo y transparente bajo la supervisión de las Naciones Unidas
Ha lamentado que la paz y la estabilidad en la región peligran por la causa de políticas adoptadas por el Reino de Marruecos, basadas en la expansión y la agresión contra sus vecinos y la producción y exportación de cannabis, hecho que tiene estrecha relación con la financiación e impulso de bandas del crimen organizado y los grupos terroristas.
El gobierno saharaui ha llamado a la ONU a asumir sus responsabilidades ante la intransigencia marroquí y acelerar la descolonización de la última colonia en África.