Fuente: lavanguardia.com
Varias ONG han denunciado, en un escrito dirigido a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), el aprovechamiento que Marruecos hace de los recursos naturales en el Sáhara Occidental.
En un informe dirigido a la oficina del ACNUDH y remitido a Efe, el Centro Robert F. Kennedy para la Justicia y los Derechos Humanos, junto a otras ONG internacionales y saharauis denuncian que los recursos naturales de los saharauis son «explotados sin el consentimiento» de los propios saharauis o sus representantes.
El centro acusa a Marruecos de impedir a la población saharaui acceder libremente a sus recursos, «que no son explotados en su nombre ni con su consentimiento», refiriéndose a los fosfatos, la pesca y las tierras de pastoreo, entre otros.
El informe denuncia la «discriminación» que sufren los empleados saharauis en las minas de fosfatos de Bou Craa, en el Sáhara Occidental, y considera que los fosfatos exportados «no sirven a los intereses de la población indígena».
Critica también que el acuerdo de pesca firmado entre Marruecos y la Unión Europea en 2013 no haya excluido las capturas en los caladeros del Sáhara Occidental.
Además, subraya que los saharauis ocupan «una ínfima parte» de los empleos generados por la explotación de los recursos naturales de la zona.
El Centro Robert F. Kennedy dirigió estas acusaciones a la oficina del ACNUDH con motivo de su revisión este mes de septiembre de la aplicación por parte de Marruecos del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales.
En un comunicado, la presidenta del Centro Robert F. Kennedy para la Justicia y los Derechos Humanos, Kerry Kennedy, distinguida por su defensa del independentismo saharaui, pidió hoy a la comunidad internacional que insista para que «Marruecos respete sus obligaciones internacionales».
«Marruecos viola de forma sistemática los derechos económicos, sociales y culturales de los saharauis en su territorio, en una clara contradicción con el pacto», denunció Kennedy.
Marruecos siempre ha defendido que los proyectos e inversiones en el Sáhara Occidental están dirigidos a la emancipación de la población local y el rey Mohamed VI mantuvo en un discurso el pasado noviembre que el país invierte siete veces de lo que gana en ese territorio.