Por Isabel Lourenço, 23 de febrero, 2016 – porunsaharalibre.org
El 27 de Febrero de 2016 se cumplen 40 años del nacimiento de la República Árabe Saharaui Democrática. El pueblo saharaui se unió y creó su patria con una identidad milenaria transformandose en ese momento en aquello que se exige en un mundo moderno, una organización admistrativa con forma de estado según los patrones y normas creadas por dicho mundo «civilizado».
Con una capacidad de resistencia, fuerza e inteligencia extraordinaria construyen día a día un estado que puede enseñar mucho a tal mundo «civilizado», una población que a pesar de las condiciones infrahumanas impuestas por un exilio forzado por un lado y una ocupación de su territorio por otro, tiene todas las características de un estado moderno, con la escolarización del 100% de todos los niños, una alfabetización del 95% en los adultos, una distribución ejemplar de la ayuda alimentaria, que viene en cantidades cada vez más reducidas, de forma equitativa, una participación sin precedentes en Norte de África de las mujeres en los todos los órganos ejecutivos y estructuras públicas, en todas las profesiones desde médicas, maestras y operadoras de televisión.
Estamos hablando de un estado en el exilio, en el medio del desierto más inhóspito del mundo, que tiene una televisión pública y donde hay médicos y hospitales que administra los escasos recursos para que las personas tengan la mejor asistencia posible en el marco de un campamento refugiados.
El pueblo saharaui y sus dirigentes, a pesar de muchas deficiencias que puedan tener, son un ejemplo de estado, un ejemplo de igualdad participativa, un ejemplo de tolerancia y un ingenio de multiplicación de recursos.
Merecen todos un respeto igual a cualquier nación, merecen que se respeten sus documentos, su pasaporte, su tarjeta de identidad, sus representaciones en varios países alrededor del mundo.
A pesar de que se solicita un visado en las embajadas de Argelia para visitar los campamentos de refugiados saharauis y los territorios liberados de la RASD, no podemos olvidar que Argelia es el país de acogida de los refugiados saharauis, estos tienen un Gobierno y Estado propoio y que cuando se visitan los campos de refugiados y la RASD, es la RASD y sus representantes, representantes del frente Polisario a quien se debe informar y solicitar permiso de visita.
A menudo, por la amabilidad y hospitalidad que nos es mostrada por este pueblo y por su sencillez y apertura, amigos nos dan la bienvenida con los brazos abiertos, nos olvidamos que merecen el respeto formal de cualquier diplomático, cualquier representante de un país extranjero.
Y es precisamente porque son nuestros amigos, nuestros hermanos y hermanas de corazón que les debemos más respeto.
Hoy en día y por sus 40 años de existencia declaro públicamente: Yo econozco la República Árabe Saharaui Democrática, reconozco su condición de estado, nación, reconozco sus fronteras y todas sus instituciones gubernamentales y sus organizaciones, reconozco el Frente Polisario y el sus delegados/as como representantes legítimos de su pueblo.
Feliz cumpleaños
Isabel Lorenço