Londres, 24/02/2016 (SPS) / VSOA
Los activistas saharauis de derechos humanos continúan siendo “blanco de la represión” en el año 2015 por parte de las autoridades marroquíes que “a menudo utilizan la fuerza excesiva” según el informe de Amnistía Internacional 2015/2016 publicado hoy miércoles.
“Las autoridades marroquíes perseguían a los activistas saharauis que defendían la autodeterminación del Sáhara Occidental y denunciaban abusos contra los derechos humanos”, subraya el informe de Amnisitia Internacional.
Como prueba de ello, Amnistía Internacional hizo hincapié en que las autoridades de Marruecos han “dispersa las manifestaciones, a menudo utilizando una fuerza excesiva, y han iniciado un proceso penal contra los manifestantes”.
El informe afirma que, en este sentido, muchos de los presos saharauis han entrado en huelgas de hambre para protestar contra la tortura y los malos tratos.
Según el informe, las autoridades también restringían el acceso al territorio de los defensores y defensoras de los derechos humanos, activistas y periodistas extranjeros al Sáhara Occidental, prohibiendo entrar a algunos y expulsando a otros.
Además, el informe señala que más de dos años después de su detención, el defensor de la autodeterminación saharaui, Mbarek Daoudi, fue condenado a cinco años de prisión por cargos que parecían obedecer a motivos políticos, entre ellos estar en posesión de munición sin licencia e intentar fabricar un arma.
AI recordó que tras la detención de Daoudi en septiembre de 2013, los interrogadores lo habían obligado a firmar una declaración inculpatoria mediante tortura.
“En diciembre, Hamza Ljoumai fue condenado a dos años de prisión por haber participado en 2013 en una manifestación en favor de la autodeterminación. Dijo que la policía lo había torturado bajo custodia y obligado a firmar un informe de interrogatorio que no le permitieron leer”, señala el informe.
Otras víctimas de “graves violaciones de los derechos humanos” fueron mencionados en el informe, así como las “restricciones” impuestas a las organizaciones saharauis de los derechos humanos.
La ONG también señaló que en abril, el Consejo de Seguridad de la ONU renovó por un año el mandato de la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental (Minurso), sin la inclusión de mecanismo de seguimiento de la situación de los derechos humanos en el Sahara Occidental”.
Amnistía denuncia que Marruecos le prohíbe el trabajo sobre el terreno
(Terra / EFE).- El gobierno de Marruecos tiene prohibido “de facto” el trabajo sobre el terreno a Amnistía Internacional (AI), denunciaron hoy sus responsables en rueda de prensa durante la presentación del informe mundial del organismo.
“El gobierno marroquí debe decirlo claramente: ¿Nos consideran persona non grata?”, se preguntó el director de la sección marroquí de AI, Mohamed Sektaui, quien precisó que las prohibiciones a sus actividades han sido siempre orales y no por escrito.
El pasado mes de junio, dos investigadoras de AI que trabajaban sobre el trato a los emigrantes en la zona fronteriza con las ciudades españolas de Ceuta y Melilla fueron detenidas durante varias horas y expulsadas, en un contexto de tensión entre AI y el gobierno marroquí por la inclusión de Marruecos en un informe de la organización sobre la tortura en el mundo.
Pero desde entonces, según precisó el presidente de la sección local, Dris Haidar, las autoridades han prohibido en dos ocasiones más las actividades de AI, una en Tánger (un taller de formación a médicos y enfermeros sobre medicina forense) y otra, ayer mismo, en Fez (un taller para niños sobre derechos humanos).
“Nos dicen que no somos objetivos, que tenemos una agenda que responde a intereses políticos y que no tomamos en cuenta los avances de Marruecos”, dijo Haidar, que consideró que su existencia como ONG en Marruecos es ahora poco más que “una fachada”.
La prohibición de las actividades sobre el terreno de AI se suma a la decretada contra la otra gran organización internacional, Human Rights Watch, a la que el gobierno también considera parcial, y a las sufridas con regularidad por la Asociación Marroquí de Derechos Humanos, la mayor ONG del país.
Sektaui lamentó en la rueda de prensa que los derechos humanos no solo no han avanzado, sino que han retrocedido en los últimos años, con excepción de la lucha contra la tortura, donde sí parece haber una voluntad del Estado de erradicar este fenómeno.
En la parte del informe dedicada a Marruecos, AI destaca que el gobierno de Rabat restringió durante el 2014 las libertades de expresión y asociación, persiguieron a los independentistas saharauis y sometieron a un “uso innecesario y excesivo de la fuerza” a los emigrantes subsaharianos.