Fuente: bez.es – Marta Trejo,
Rabat expulsó ayer a 80 trabajadores de la MINURSO como represalia por declaraciones del secretario de la ONU, Ban Ki Moon, que describió como «ocupación» el estatus del reino alauí sobre la región.
Rabat anunció el pasado viernes un ultimátum de tres días a las Naciones Unidas para retirar a 84 miembros de la MINURSO (Misión de la ONU que trabaja en el diálogo para conseguir un referéndum por el Sáhara Occidental) de Marruecos. Esta reacción se debe a la reciente visita del Secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, al campamento de regfugiados saharaui de Smara en Argelia, que ha acuciado las tensiones por parte del ejecutivo marroquí tras unas declaraciones del secretario tachando de «ocupación» la situación actual del Sáhara Occidental.
Hace dos semanas Ban Ki-moon visitó la región de los campamentos para abordar la cuestión del Sáhara Occidental y reanudar las negociaciones. Antes de su visita a los campamentos tenía planeado pasar por Rabat pero Mohamed VI no se encontraba disponible ni dispuesto a recibir al secretario.
Rabat acusa a Ban Ki-moon de »alejarse de su neutralidad, de su objetividad y de su imparcialidad»
A pesar de todo, Rabat no ha tardado en criticar esta visita acusando al secretario de políticamente incorrecto y tachando su visita de poco neutral. ‘’El secretario se ha alejado de su neutralidad, de su objetividad y de su imparcialidad, expresando abiertamente una indulgencia culpable con un estado títere, desprovisto de todos los atributos, sin territorio, ni población, ni bandera reconocida’’, explican desde el ejecutivo marroquí.
A su vez se han convocado varias manifestaciones en Marruecos en contra de la visita del secretario que ha dejado clara su «profunda decepción e indignación» por la manifestación convocada el pasado domingo en Rabat que consideró un «ataque» a su persona.
La posición fue expresada por Ban en una reunión el pasado lunes con el ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Salahedin Mezuar, en la que se analizaron temas vinculados con el conflicto del Sáhara Occidental. Marruecos, por otra parte, está dispuesto a hablar con Christopher Ross, el enviado especial de Ban, para que ‘’reanude sus visitas y vuelvan a comenzar nuevas rondas de negociaciones’’.
Se adoptarán las medidas que sean necesarias para asegurar que la misión cumple su mandatoStephan Dujarric
Portavoz de la ONU
Todo esto ha desencadenado el ultimátum a la MINURSO, que lleva supervisando el alto al fuego desde 1991 e intenta ayudar a las partes en conflicto a organizar un referéndum sobre el futuro del Sáhara Occidental. Desde la ONU, el portavoz Stephan Dujarric ha insistido en que ‘’se adoptarán las medidas que sean necesarias para asegurar que la misión cumple su mandato’’.
La misión de la ONU en el Sáhara Occidental está compuesta por 482 efectivos, de los que 246 son civiles. Lo que se espera ahora es que Christopher Ross sea capaz de ayudar a reconducir la situación.
Marruecos se niega a dialogar y amenaza a aquellos que lo intenten
El conflicto del Sáhara Occidental sigue estancado mientras Marruecos afianza su poder en la zona. Tras 40 años de ocupación ilegal (no reconocida por las Naciones Unidas) la comunidad internacional toma tímidas decisiones por miedo a la repercusión marroquí.
El Tribunal Europeo de Justicia dictó en diciembre una sentencia anulando el acuerdo comercial entre Bruselas y Rabat a la hora de exportar productor provenientes del Sáhara Occidental, ‘’la soberanía del Reino de Marruecos sobre el Sáhara Occidental no está reconocida ni por la UE ni por la ONU’’, dicta el fallo. La justicia europea da la razón así al Frente Polisario (Gobierno provisional del pueblo saharaui que lucha por el derechos de autodeterminación) que había presentado un recurso a finales de 2012 con carácter de persona jurídica.
Esta decisión es recurrible en el plazo de dos meses y no afecta al acuerdo de liberalización comercial con Marruecos, sólo se aplica a los productos que provengan de la zona ocupada (productos agrícolas y pesqueros que suponen un 0,7% de las exportaciones, un total de 1.500 millones de euros).
Justo unos días antes de que se aprobase esta sentencia Mohamed VI, monarca marroquí, hacía un llamamiento a los países del Golfo para invertir en la zona, ‘’las inversiones extranjeras son escasas y se necesitan proyectos de desarrollo en la región’’ explica el comunicado conjunto del Ministerio de Interior y de Finanzas marroquí.
Y es que los empresarios reconocen discretamente, según afirma la agencia EFE, que no desean invertir en el territorio hasta que se encuentre una solución definitiva al conflicto entre Marruecos y el Frente Polisario. Véase el ejemplo de Suecia, que tras la puesta en marcha de un proyecto de ley para reconocer la República Árabe Democrática Saharaui (RADS) vio anulados sus proyectos empresariales de IKEA dentro del reino alauí. Finalmente han tenido que retirar esta propuesta de la mesa para seguir adelante con la apertura del almacén.
El único país que ha respondido positivamente a esta solicitud es Qatar, cuya campaña estatal Qatar Petroleum anunció en febrero que comparía a la compañía Chevror el 30% de una licencia de prospección petrolera en las aguas saharauis.
40 años de inmovilismo
Ni económica ni políticamente. Marruecos no está dispuesto a dar su brazo a torcer. Su oferta al Frente Polisario se basa en una autonomía dentro del reino con posibles miras a un referéndum (sin ninguna garantía ni fecha). Esta oferta es apoyada por EEUU que el pasado sábado, a raíz de la polémica visita de Ban Ki-moon, explicaba que «consideramos que el plan de autonomía de Marruecos es serio, realista y creíble, y representa una aproximación que podría satisfacer las aspiraciones del Sáhara Occidental», dice el portavoz de la misión de Estados Unidos ante la ONU, Kurtis Cooper.
El Frente Polisario, por su parte, busca la autodeterminación a toda costa y no está dispuesto a escuchar otro tipo de ofertas. ‘’Estamos hartos de esperar. Parece que la ONU necesita ver sangre para intervenir ante las injusticias, espero que no lleguemos a ello pero nos están empujando a la radicalización’’, comenta Bouchraya Hammoudi, ex primer Ministro de la RASD a bez.es.
ERC pide reconocer la RASD como país
ERC ha presentado en el Congreso de los Diputados tres iniciativas en defensa de la causa saharaui que buscan instar al Gobierno a reconocer como país la autoproclamada República Arabe Saharaui Democrática (RASD) y exigirle que supedite los acuerdos con Marruecos a que el reino acceda a celebrar un referéndum de autodeterminación en el Sáhara Occidental.
Las iniciativas de los independentistas se han presentado en forma de proposición no de ley -no son vinculantes jurídicamente aunque sean aprobadas, pero sí constituyen un mandato político- y se discutirán en las Comisiones de Asuntos Exteriores, Justicia y la Mixta para la UE. La primera de las propuestas busca que la Cámara Baja pida al Gobierno que reconozca oficialmente a la RASD como ya hacen 81 países, entre ellos la mayoría de los africanos. España, que cedió la Administración de su excolonia en 1975 a Marruecos y Mauritania, no reconoce la RASD, como tampoco la soberanía marroquí sobre ese territorio.
España tiene una responsabilidad histórica y deuda moral con la población saharaui
El reconocimiento de la RASD obligaría al Gobierno español a elevar el estatus diplomático del Frente Polisario, que es el siguiente paso que demanda ERC en su iniciativa.La proposición no de ley pide asimismo conceder becas de estudio en España para saharauis, defender en las organizaciones internacionales la celebración del referéndum de autodeterminación y «subordinar» los acuerdos con Marruecos a su cumplimiento de las resoluciones de la ONU sobre el Sáhara, en especial por lo que se refiere al referéndum y el respeto de los derechos humanos de la población saharaui.
ERC ha presentado una segunda iniciativa para su debate en la Comisión Mixta para la UE que persigue instar al Ejecutivo a que defienda ante la UE que Marruecos no tiene legitimidad para negociar la explotación de los recursos del Sáhara Occidental. En la exposición de motivos de las tres iniciativas, ERC subraya que «el Estado español», como antigua potencia colonial, tiene una «responsabilidad histórica y deuda moral con la población saharaui y la RASD todavía confía en el papel protagonista que debe desarrollar en el proceso hacia la independencia saharaui».