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Grupo de presos políticos saharauis de Gdeim Izik, la prisión local de Salé 1, 08/04/2016
(Repudio a Marruecos)
En un acto peligroso y sin precedentes que refleja las continuas violaciones y nos recuerda al régimen nazi en tiempos pasados, las autoridades de ocupación marroquíes procedieron el pasado miércoles (7-4-2016) a la detención de una delegación de abogados y expertos en derecho internacional, que estaban hospedados en un hotel de Rabat, capital de Marruecos. Fueron interrogados y citados a abandonar el reino para ser expulsados por la fuerza a sus países, en una violación flagrante de las normas y convenciones internacionales.
La intención de los juristas era dar una rueda de prensa para denunciar las continuas violaciones de los derechos humanos y la condena arbitraria de un tribunal militar, y sobre nuestra grave condición de salud, deteriorada dentro de la cárcel.
Los juristas expulsados son:
El magistrado asturiano Jesús María Martín Morillo, los abogados andaluces Francisco Serrano y Juan Carlos Gómez Justo, la abogada aragonesa Altamira Guelbenzu y la abogada canaria María Nieves Cubas Armas, así como el abogado belga Eric David, la abogada francesa Ingrid Metton y la asistente, de la misma nacionalidad, Joelle Toutain.
Este grave acto es una muestra más del menosprecio del estado marroquí hacia los derechos humanos y a las exigencias del derecho internacional. Es, una vez más, el reflejo de las acusaciones sin fundamento que nos imponen.
Al impedir a la Comunidad Internacional, jurista y observadores hablen sobre estas continuas violaciones o que se acepta la ofensa al derecho internacional y los derechos humanos, esto se convierte en un crimen, no es más que una violación flagrante de la ley y un insulto a la comunidad internacional.
Estamos muy preocupados ya que estos actos inhumanos mantienen las continuas violaciones como un apartheid, por eso declaramos a la opinión pública lo siguiente:
1. Condenamos firmemente esta cobarde y peligrosa expulsión, por parte del Estado marroquí, de los abogados internacionales, que confirma su miedo a ser denunciados por las graves violaciones de derechos humanos que cometen.
2. Nos solidarizamos de una forma absoluta e incondicional con todos los observadores que fueron vejados, insultados y expulsados, por parte del Estado marroquí, en especial con la delegación de abogados internacionales.
3. Hacemos un llamamiento a todas las personas de conciencia, defensores de la libertad, del derecho, de la justicia y la paz, a unir fuerzas para intervenir y poner fin a nuestro cautiverio y obligar al estado marroquí a respetar las exigencias del derecho internacional y las obligaciones internacionales, que garantice nuestra liberación y la liberación de todos los presos políticos saharauis, sin ningún tipo de limitación o condición.
Grupo de presos políticos saharauis de Gdeim Izik, prisión local de Salé 1.
08/04/2016