Diario La Realidad Saharaui. DLRS / Foto: Poemario Sahara Libre – Madrid 1 abril 2017
Desde finales de diciembre de 2016 Marruecos con ese insaciable afán de aparentar y mostrar al mundo una imagen diferente a la realidad, dio comienzo a lo que ese régimen ha osado en llamar juicio, esta vez por un tribunal civil a los héroes saharauis de Gdeim Izik, una farsa con todos los ingredientes necesarios para mantener engañado a “su pueblo marroquí” y para seguir intentando mantener oculta la verdad a la comunidad internacional.
La verdad es que calificar a esta puesta en escena de juicio es faltar a la verdad, ni es juicio, ni es nada que se le parezca. Marruecos no puede juzgar siendo un país ocupante, no tiene derecho a juzgar a los ciudadanos del país que ocupa, que reprime y que tortura. En las condiciones actuales de ocupación del Sáhara Occidental, ningún juicio a ciudadanos saharauis por parte de Marruecos puede considerarse como algo normal. La situación de ocupación implica la aplicación del derecho internacional humanitario en virtud del artículo 2 común a los cuatro Convenios de Ginebra. Y Marruecos evidentemente no ha movido un dedo por cumplir con ese derecho.
De lo que se debe hablar es de las injustas condenas dictadas de manera arbitraria contra los ciudadanos saharauis, los 24 presos políticos de Gdeim Izik que fueron detenidos, torturados y condenados debido a su reivindicación pacífica del derecho de autodeterminación del Sáhara Occidental y porque junto a muchos miles de saharauis decidieron alzar su voz contra la represión, la injusticia y la marginación que sufren en su propia tierra.
Los 24 representan a los miles de saharauis que levantaron sus jaimas como símbolo de identidad y de unidad, reivindicando sus derechos a una vida digna, reivindicando su libertad; representan a los saharauis en todas las ciudades y pueblos del Sáhara Occidental, representan a los saharauis de los campamentos de refugiados y de las zonas liberadas del territorio saharaui, representan a los saharauis que viven repartidos por el mundo; los héroes de Gdeim Izik representan a todos los saharauis que resisten bajo la represión en su tierra y a los que siguen esperando retornar a ella, libre y soberana.
En un llamamiento de abogados internacionales para defender a los presos de Gdeim Izik, se destacaba que Los 24 saharauis condenados en el marco del proceso de Gdeim Izik son personas protegidas en el sentido del artículo 4 del cuarto Convenio de Ginebra y debería por tanto serles aplicado el derecho internacional humanitario. Por lo tanto los presos solicitan la aplicación de las siguientes medidas del derecho internacional humanitario:
- La declaración de incompetencia del Tribunal de apelación de Rabat en beneficio de un tribunal situado en el territorio ocupado (artículo 66 del cuarto Convenio de Ginebra).
- Su transferencia inmediata a una prisión situada en el territorio ocupado (artículo 76).
- Que se esclarezcan las siguientes violaciones del derecho internacional humanitario de las que han sido víctimas.
- Artículo 32 que prohíbe la tortura y otras brutalidades.
- Artículos 71 y 72 que prohíben condenar a una persona protegida como consecuencia de un proceso irregular caracterizado principalmente por tomar en consideración las confesiones obtenidas o firmadas bajo la tortura, el no respeto de la presunción de inocencia, la irregularidad y parcialidad de la parcialidad de la composición del tribunal, la violación de los derechos de la defensa y del derecho a citar a testigos.
Marruecos, como es habitual, ha hecho caso omiso a estas demandas como lo ha hecho a lo largo de más de cuarenta años de ocupación del Sáhara Occidental, con todas las resoluciones internacionales y con las reivindicaciones legítimas del pueblo saharaui.
El verdadero juicio es el que los 24 héroes de Gdeim Izik hicieron al régimen de Marruecos y a sus representantes dejando en evidencia las falsedades atribuidas a los ciudadanos saharauis, dejando en evidencia, ante los observadores internacionales y ante los mismos marroquíes, las artimañas y las mezquindades del majzén para fabricar pruebas acusatorias para implicar a ciudadanos saharauis en delitos que solo el régimen ha cometido. El majzén es el único y verdadero culpable.
Los héroes de Gdeim Izik con la frente en alto, uno por uno, expresaron en alta y clara voz su inocencia de todas las acusaciones que se les imputaban, expusieron detalladamente los actos de represión, las torturas y los secuestros a las que habían sido sometidos. Todos los presos políticos en sus declaraciones expresaron su convicción en la justa lucha que defienden y en el derecho del pueblo saharaui a la libertad, destacando que el F. POLISARIO es el único y verdadero representante del pueblo saharaui y que el verdadero motivo de su arresto y su condena es su posición política con respecto a la ocupación por el estado marroquí de su territorio desde el año 1975.
Los héroes de Gdeim Izik han dejado claro que están enfrentándose a un ilegal juicio por motivos meramente políticos, que nada tienen que ver con actos delictivos y que los auténticos autores y ejecutores de dichos actos son los aparatos represivos del régimen ocupante de Marruecos.
En resumen hay tres elementos que debemos destacar en este ilegal juicio a los héroes de Gdeim Izik, donde ha quedado demostrado que el estado marroquí es el responsable de todos los actos de violencia cometidos antes, durante y después del desmantelamiento del campamento de la dignidad de Gdeim Izik.
Los 24 presos políticos de Gdeim Izik son inocentes de todas las acusaciones de actos criminales que les han sido atribuidos.
Los 24 presos políticos ratificaron sus posiciones políticas y sus convicciones contrarias a la ocupación y reafirmaron su defensa del derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación.
Los 24 presos políticos demostraron con evidencias y describieron con detalles los sufrimientos que han padecido a raíz de los malos tratos, las vejaciones y las torturas por parte de los aparatos represores del régimen marroquí en las cárceles marroquíes.
Otro elemento a destacar es el apoyo y la solidaridad que los presos de Gdeim Izik han recibido de todas partes del mundo y el acompañamiento de cientos de ciudadanos saharauis que se han desplazado a la capital del reino de Marruecos para pedir la anulación de los cargos y la inmediata liberación de todo el grupo. A pesar de las intimidaciones y las amenazas los saharauis no se amedrentaron y desde la capital del enemigo gritaron a los cuatro vientos por la libertad y la independencia del Sahara Occidental y aclamaron a los héroes de Gdeim Izik orgullosos de lo que representan e ilusionados con el mensaje de libertad y dignidad que por las calles de Rabat diseminan.
El régimen marroquí continúa con la farsa, veremos hasta cuando, ahora se pospone hasta principios de mayo.
Lo que no se pospone es la continua violación de los derechos de los saharauis en las zonas ocupadas y en las cárceles marroquíes donde Marruecos día y noche mantiene la represión y la tortura.