El informe del SG sobre la situación en el Sahara Occidental está dividido en acontecimientos recientes, actividades políticas, actividades de la MINURSO, actividades humanitaria y de derechos humanos, Unión Africana y aspectos financieros terminando con observaciones y recomendaciones. Esta edición previa del informe del SG de la ONU, António Guterres, sobre la situación en el Sahara Occidental está dirigido a los miembros del Consejo de Seguridad que decidirá sobre la prórroga del mandato de la MINURSO a finales de este mes.
En la primera parte del informe referente a los acontecimientos recientes, el SG se centra en la situación Guergarat desresponsabilizando por completo a la MINURSO y el Consejo de Seguridad en conflicto creado debido a la inoportuna ineficacia de estos mecanismos de la ONU. Cuando se refiere a Gendermería Nacional (GN) de la RASD pone GN entre comillas, pero no lo hace cuando se trata de Gendermería Real Marroquí, dando la impresión de que la GN del Frente Polisario GN no es oficial. Continúa refiriéndose a las «violaciones» de una parte y otra poniendo énfasis en el hecho de que el Polisario no permite pasar a los vehículos con los mapas en los que el Sahara Occidental se representa como parte de Marruecos, da la bienvenida a la retirada de Marruecos, pero pide la retirada del Polisario. Es lamentable que la SG anterior y CS no hayan tenido una posición igualmente fuerte exigiendo la inmediata retirada de Marruecos, lo que habría evitado toda la «tensión» actual.
Curiosamente lo largo de este punto, en el que enumera todos los acontecimientos cronológicamente no se refiere a la demora de la MINURSO en actuar.
En el mismo punto se aborda la cuestión de la expulsión del personal de la MINURSO, recordando que sólo 25 pudieron regresar, y habla de la vuelta de 17 empleados más, lo que hace un total de 42, que es sólo la mitad de los empleados expulsados.
En el párrafo sobre las actividades políticas informa de varias visitas y conversaciones mantenidas a distintos niveles para reactivar las negociaciones con una quinta ronda y se refiere a la incapacidad de realización de una visita del enviado especial a la región debido a la posición de Marruecos.
Se refiere al encuentro del 17 de marzo con Brahim Gali, secretario general del Frente Polisario, en el que transmite que lamenta que la FP no se haya retirado de la zona de amortiguamiento en Guergarat y que quiere reanudar las negociaciones con una nueva dinámica y el espíritu, pero que para eso necesita que se cree un ambiente que favorezca poner fin a la tensión en Guergarat.
En las actividades de la MINURSO enumera los trabajos realizados que se limitan a las patrullas, contactos, supervisión de desminado, cuestiones de seguridad del propio contingente y señala que al oeste del muro el contacto está limitado a los representantes del Ejercito Real Marroquí mientras que el este (territorios bajo control de POLISARIO y campamentos de refugiados) contactan con todos los organismos presentes además de la coordinación con el frente Polisario.
El SG apunta como desafío a las operaciones de la MINURSO varios puntos, empezando por decir que existen divergencias de interpretación del mandato de la MINURSO entre el Frente Polisario y Marruecos. Según el SG, Marruecos entiende que la MINURSO tiene como mandato supervisar el alto el fuego, el apoyo al desminado y apoyar medidas de creación confianza en el caso de vuelvan a ser implementadas, tras su interrupción en 2014. Sin embargo, no se menciona que el nombre de la MINURSO es claro y no da lugar a dudas de interpretación: Misión de las Naciones Unidas para el referéndum en el Sahara occidental, ni aclara que las medidas de confianza terminaron debido a las acciones de Marruecos.
Según el SG el Frente Polisario «interpreta» el mandato de la MINURSO tiene como objetivo principal el referéndum y afirma que no hay acuerdo entre las partes sobre el mandato.
Guterres cree que los contactos al «oeste» del muro con el CNDH (Consejo Nacional de Derechos Humanos de Marruecos), con «representantes locales» y sheiks tribales permiten a la MINURSO tener un conocimiento amplio e imparcial de la situación. Algo inconcebible visto los elementos referenciados; CNDH, representantes locales y los «sheiks» son todos aliados o brazos de las autoridades de ocupación marroquíes y el Majzen.
En el párrafo sobre los derechos humanos y actividades humanitarias, recuerda la acción claramente insuficiente de la ONU con respecto a la distribución de alimentos y alojamiento, entre otros.
En cuanto a los derechos humanos, recuerda la última visita de una delegación del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU a El Aaiún y Dajla en 2015, pero no menciona que esta misma delegación fue atacada por las fuerzas marroquíes durante su visita a una casa activistas saharauis. Esta fue la última visita autorizada por Marruecos. El SG se refiere a la expulsión de 187 extranjeros expulsados del territorio, cantidad confirmada por el Reino de Marruecos que clasifica estos extranjeros expulsados de las «provincias del sur» como una amenaza a la seguridad nacional o porque no obedecen a las leyes de inmigración.
En el punto 74 el SG se refiere al caso del grupo Gdeim Izik con graves errores, hablando de «nuevo juicio» de 23 acusados, cuando en realidad se tratan de 24. Continúa diciendo que esta cifra incluye a 21 presos condenados a perpetua lo que también no es cierto, ya que ocho de los presos están condenados a perpetua, y los restantes de 20 a 30 años de prisión. Esta falta de rigor es preocupante ya que demuestra la calidad de la información procesada por el SG, que ha recibido numerosos informes sobre este caso y peticiones de libertad de estos presos con los datos correctos que al parecer no se tuvieron en cuenta. También no se refiere a la decisión del Comité contra la Tortura de la ONU en este caso, es evidente que Marruecos ha violado todas las reglas, leyes, acuerdos y convenciones nacionales e internacionales firmados y ratificados por el uso de la tortura como método de construcción de un «caso jurídico».
En la terminología adaptada por Guterres no se dice Pueblo del Sahara Occidental. La frase utilizada: «alcanzar una solución política mutuamente aceptable que incluya la solución de la controversia sobre el estatuto definitivo del Sáhara Occidental, incluyendo un acuerdo sobre la naturaleza y la forma del ejercicio de la libre determinación», reemplaza el texto original utilizado hasta el momento en que todos los documentos de las Naciones Unidas: «una solución política mutuamente aceptable entre las partes y de conformidad con las resoluciones de la ONU con el fin de lograr el derecho a la libre determinación del Pueblo del Sáhara Occidental». Según la formulación de Guterres, la autodeterminación parece ser algo que se puede ejercer en diferentes formas abriendo una vez más las puertas a Marruecos a «interpretaciones» y nuevas propuestas.
Finaliza el informe refiriéndose a la necesidad de reactivar las negociaciones con una quinta ronda. Se refiere el punto de vista de Marruecos que mantiene un plan de autonomía y el «punto de vista» del Frente Polisario, es decir, la realización del referéndum de autodeterminación.
Una vez más Guterres parece olvidar que no puntos de vista, pero si posicionamiento, de un lado de Marruecos que niega todo lo que se ha acordado en el alto el fuego y por el otro el Frente Polisario que, además de respetar el alto el fuego acordado 1991, también acuerda añadir las opciones del referéndum sobre la propuesta de autonomía de Marruecos. Esto significa que no hay ningún impedimento para el referéndum, en teoría, ya que tiene el «punto de vista de Marruecos», el único impedimento es la oposición de Marruecos una vez que sabe que el referéndum no dará lugar a la elección de la autonomía.
Guterres propuso relanzar las negociaciones con un nuevo «espíritu» en el que las negociaciones estén abiertas a las propuestas de las dos partes. Propone una nueva ampliación del mandato de la MINURSO hasta abril de 2018. Agradece al Consejo de Seguridad sus esfuerzos para la restauración total de la funcionalidad de la MINURSO, que según la información del informe deberá ocurrir debido al anuncio por parte de Marruecos del 4 y 5 abril, donde dice «permitir» el retorno. Agradece la retirada de Marruecos Guergarat y sigue estando «profundamente preocupado» por la presencia del Frente POLISARIO en la zona.
Pide que se refuerce la ayuda humanitaria a los campamentos de refugiados por parte de la comunidad internacional y en lo que respeta a los derechos humanos, al oeste y este del muro, que se puedan realizar «visitas» de los mecanismos de las Naciones Unidas.
Todo el informe tiene una cuidada terminología de acuerdo con los deseos de Marruecos, evitando mencionar los territorios ocupados y hablando de oeste y este del muro, dando pistas para relanzar las negociaciones con una nueva dinámica y espíritu de «nuevas opciones posibles» para la solución de conflicto.
Por un Sahara Libre recuerda a sus lectores el artículo publicado el 12 de septiembre de 2016 en el que clasificábamos el actual SG como el candidato que «no incomoda», lamentablemente hasta el momento esta descripción ha sido confirmada tanto en el Sahara Occidental como en el resto de los conflictos en el mundo.