El sábado, 30 de abril, Hamadi Naciri entró en coma después de 13 días de huelga de hambre y fue llevado a urgencias del hospital de Smara.
Hamadi Naciri y Gabal Jouda, iniciaron una huelga de hambre abierta, el pasado el 17 de abril, frente al edificio de la administración Smara contra las represalias arbitrarias que han sufrido a causa de su condición de militantes saharauis y en contra de la política de apartheid promovida por el régimen de ocupación marroquí.
Hamadi Naciri, Presidente de Organización Freedom Sun para la protección de defensores de derechos humanos saharauis y la Sra Gabbal Jouda, miembro fundadora de la misma organización, reclaman el respeto de sus derechos sociales y económicos que les son negados por el régimen de ocupación y apartheid marroquí .
Los dos activistas esperan con esta de acción alertar a los medios de comunicación los problemas diarios de supervivencia de la población saharaui, incluyendo el desplazamiento forzado al territorio marroquí por la recolocación laboral y el control de la alimentación.
El Sr. Naciri reclama la transferencia de lugar de trabajo, de acuerdo con la ley, a su ciudad natal o al menos a una ciudad saharaui. Naciri fue trasladado a 1200 kilómetros en Khouribga, Marruecos, fuera del territorio saharaui, una manera de evitar sus actividades políticas y también dificultar su vida a nivel económico y social.
La señora Jouda, que tiene ocho hijos, exige el restablecimiento de su salario social mensual, que le fue retirado hace cuatro meses tras su participación en una protesta por la autodeterminación del Sahara Occidental.
La «asistencia social» marroquí a la población saharaui existe para controlar el «comportamiento» y evitar la participación en manifestaciones y otras acciones de la resistencia no violenta.
Los saharauis son segregados económica y socialmente, siendo esta una de las formas utilizadas por las autoridades de ocupación para controlar las actividades de los saharauis, a los que les es concedida y retirada la ayuda de cesta básica según el “comportamiento” que se exige de ellos. Otra técnica es como en el caso de Naciri, la asignación de un puesto de trabajo a más de 1000 km de distancia, «exiliando» y «aislando» de los activistas.
La gran mayoría de saharauis están en el paro debido a la política de apartheid, habiendo manifestaciones diarias de los jóvenes titulados en paro y en los territorios ocupados. Las familias sobreviven gracias a las antiguas tradiciones saharauis de intercambio y ayuda mutua. Esto conduce a un empobrecimiento y también una disminución de los matrimonios y en consecuencia de los nacimientos, otra manera de controla y diezmar población saharaui.
Hamadi Naciri, nació bajo la bandera española en 1971 y es padre de cuatro hijos, todos estudiantes. Desde la invasión de Marruecos en 1975, Naciri fue secuestrado tres veces, en una de ellas fue llevado a la prisión secreta de El Aaiún, la PC.CM. Estuvo preso en cuatro ocasiones debido a su implicación en la intifada no violenta y sus acciones de denuncia de la situación. Es presidente de la organización Freedom Sun de Smara y miembro de varias organizaciones internacionales de defensa de los derechos humanos.
Gabal Jouda, nació en 1960 bajo la bandera española, es madre de 8 hijos, 3 estudiantes y 5 en paro, miembro de Freedom Sun y activista de derecho humano, es conocida por sus actividades no violentas en defensa de la autodeterminación del Sahara Occidental.