Según informan las familias, los 15 estudiantes saharauis presos en Marraquech entraron en huelga de hambre de protesta durante 48 horas debido a los obstáculos sistemáticos que la administración de la prisión plantea a la visita de los familiares.
La administración de la prisión impide las visitas de los familiares haciendo que los visitantes esperan durante horas para entrar, informando a continuación que el tiempo de visita está agotado.
La mayoría de las familias viven a cientos de kilómetros de distancia, teniendo que gastar sumas fuera de su alcance para desplazarse.