PUSL.- La Fundación Sahara Occidental monitorizó el proceso de GDEIM IZIK que se siguió en el Reino de Marruecos, contra veinticinco presos de conciencia saharauis, el cual se alargó que duro desde el 1 de febrero de 2013 hasta el 19 de julio de 2017, los nombre son:
Abdulahi Lakfawni (Lakhfaouni Abdalahi), Abdullahi Toubali (Etawbali Abdalahi), Ahmed Sbai, Brahim Ismaili, Cheikh Banga, Deich Eddaf, El Bachir Khadda, El Houssin Ezzaoui (El Houcein Azaoui), Enaama Asfari, Hassan Aalia Hassan, Dah Laaroussi, Abdeljalil Lbakai, Laarabi, Machdoufi Ettaki (Ettaki Elmachdoufi), Mohamed Ayoubi, Mohamed Bani, Mohamed Bouryal, Mohamed El Bachir Boutinguiza, Mohamed Khouna Babait, Mohamed Lamin Haddi Mohamed, Mbarek Lefkir Mohamed Tahli, Sidi Abdallah B’hah, Sidi Adderahman Zeyou y Sidi Ahmed Lemjiyed
La Fundación desplazó observadores a TODAS las sesiones que se celebraron; en total, fueron acreditados 70 observadores, de nueve nacionalidades, que siguieron el proceso de forma metódica, desinteresada y abnegada, bajo los principios de legalidad internacional e independencia, para obtener un seguimiento y monitorización de este proceso, que ha sido calificado por todos los informes independientes realizados de NULO E ILEGAL y que, el reino de Marruecos, siguió contra defensores de derechos humanos saharauis, en uno de los proceso más vergonzosos de la historia próxima y, muy posiblemente, el proceso de vulneración del derecho internacional más largo y lamentable seguido nunca contra personal civil.
Se cumplen hoy, 19 de Julio, tres tristes años de la lacerante y vergonzante sentencia dictada por ese tribunal marroquí, creado “Ad hoc” para la represión de los defensores, y del pueblo saharaui. La falta de pudor del país ocupante, al margen de toda legalidad, sirviendo los intereses políticos de un estado, revistió la represión de un teatro jurídico, amparado por la inactividad internacional y con la connivencia de países como España, Francia y EEEUU, y con la negativa a intervenir de la UE, UN, y sus organismos, la MINURSO, han patentizado y esculpido una página absurda, dolorosa e ilegal que se perpetua en su tercer aniversario.
Recordamos que esta Fundación, ha realizado un extenso, y pormenorizado INFORME, en el que desgranando sus observadores Internacionales los hechos y el proceso a la luz del derecho internacional, denunciaron este proceso teatral y pusieron a disposición de organismos internacionales y actores en este proceso, un informe jurídico que, a día de hoy, tres años después de sus sentencia, debemos recordar, pues siguen hoy aún vigentes todas y cada una de las conclusiones que se exponían en el mismo, y es que el derecho que se les aplica, por parte del Estado Ocupante, hizo que fuera un PROCESO NULO DE PLENO DERECHO, así este informe concluía en 12 puntos resumidos, que :
1º.- Se vulneraba en sede judicial y en dependencias e instituciones, la legislación de aplicación, haciendo del proceso un proceso NULO DE PLENO DERECHO.
2ª.- Que los tribunales eran TRIBUNALES EXTRATERRITORIALES, pues operan respecto de hechos producidos fuera del territorio del Reino de Marruecos.
3ª.- Los tribunales que actuaron, eran y son incompetentes, por ser tribunales de EXCEPCION.
4ª.- Que las violaciones sexuales, torturas y tratos sufridos por los detenidos y presos, (acreditados por informes de forenses independientes) han contaminado el proceso, privando además a los presos de su derecho a un proceso justo.
5ª.- Situación ilegal de prisión preventiva durante años.
6ª.- No existieron pruebas de cargo, ni se demostró en el largo proceso, la inexistencia de pruebas de la identidad y circunstancias de las víctimas fallecidas, inexistencia de autopsias forenses; inexistencia de pruebas dactilográficas y de análisis de armas blancas y, no habiendo prueba alguna inculpatoria, presentando supuestas pruebas, DESCONECTADAS TOTALMENTE DE LOS ACUSADOS.
7ª.- Ausencia de garantías de un debido proceso legal y una correcta administración de justicia, debiendo calificar el proceso de JUICIO POLÍTICO y a los presos, como PRESOS DE CONCIENCIA.
8ª.- Se acreditaron y se denunciaron numerosos y habituales vicios en el procedimiento, que demostraban la nulidad de pleno derecho, del proceso desde su inicio.
9ª.- En dicho proceso se denunciaron, la vulneración de los derechos de libertad de expresión, conciencia, reunión y asociación.
10ª.- La detención, tortura y condena, así como su estancia en prisión de los manifestantes saharauis, responde a la política decidida y sistemática de represión de los activistas políticos que mantiene el Reino de Marruecos en el territorio del Sahara Occidental.
11ª.- El estado de terror, instalado por Marruecos en el territorio pendiente de descolonización, vulnera, además del derecho penal marroquí que se les aplica, de forma ilegal, las convenciones de Discriminación Racial, Genocidio y Torturas ratificados por marruecos.
12ª.- No se dieron en el proceso, las condiciones necesarias para la celebración de un proceso justo, ecuánime e independiente.
Hoy, el Reino de Marruecos sigue manteniendo en prisión a 19 de ellos y, como se han denunciado de forma reiterada por parte de sus defensas letradas, así como de los organismos internacionales, los presos están sufriendo en las cárceles marroquíes, tratos inhumanos y degradantes, así como las torturas, estas se suceden en todos los casos y respecto de estos presos.
El proceso sigue en marcha, y la Corte Suprema Marroquí, debe revisar en recurso planteado por las defensas, para concluir si este proceso ha cumplido con la legalidad. Las dilaciones indebidas marroquíes, se siguen produciendo tres años después, pues se niega el estado a resolver en derecho la petición de nulidad de este proceso, y por ello, además, “per se”, estas dilaciones invalidan el proceso seguido, pues no le es dado al estado Marroquí utilizar las dilaciones de proceso, para mantener en prisión incondicional, a los presos de conciencia Saharauis.
La Fundación, que continua en el seguimiento y defensa de la legalidad internacional, en este proceso de GDEIM IZIK, denuncia la situación que viven los presos, sus familias y considera que es obligada la excarcelación inmediata de los presos enjuiciados y la nulidad de un proceso, bajo el principio de legalidad, por estar ejerciendo el estado el poder fuera del amparo de la legalidad. Pues este proceso, nada tiene que ver con la legalidad internacional e interna, así como los compromisos jurídicos firmados y ratificados por Marruecos.
Esta Fundación hace un llamamiento a los organismos internacionales, para que exijan a Marruecos el fin de este proceso, de vulneración de los derechos humanos, contra los presos de Gdeim Izik, que dura casi de 10 años desde que comenzaron las detenciones de los defensores de derechos humanos saharauis.