Frente POLISARIO – Comunicado
[Bir Lehlou, República Saharaui – 30 de octubre de 2021] El 29 de octubre de 2021, el Consejo de Seguridad adoptó la resolución 2602 (2021) por la que prorrogó el mandato de la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental (MINURSO) hasta el 31 de octubre de 2022.
El Frente POLISARIO rechaza categóricamente la inacción y el deplorable silencio del Consejo de Seguridad, en particular de algunos miembros influyentes, que se manifiestan tanto en la letra como en el espíritu de su nueva resolución que constituye un importante retroceso que tendrá graves consecuencias sobre la paz y la estabilidad en toda la región.
La adopción de esta resolución constituye también una desafortunada vuelta a la política de “lo de siempre”, ya que ignora por completo el estado de guerra que se vive en el territorio desde el 13 de noviembre de 2020 como resultado de la grave violación por parte del Estado ocupante de Marruecos del alto el fuego de 1991 y de los acuerdos militares relacionados.
El hecho de que la resolución no prevea ninguna medida práctica para garantizar la plena aplicación del mandato para el que se estableció la MINURSO en virtud de la Resolución 690 (1991) del Consejo de Seguridad y para hacer frente con firmeza a los intentos del Estado ocupante de Marruecos de legitimar los hechos consumados coloniales impuestos por la fuerza en los Territorios Ocupados del Sáhara, equivale a alentar al Estado ocupante y a premiarlo por su intransigencia, su obstruccionismo y su política agresiva.
En lugar de adoptar un enfoque equilibrado, transparente e imparcial para abordar con firmeza las nuevas realidades sobre el terreno, el Consejo ha optado, lamentablemente, por la inacción habitual, a pesar de la fragilidad de la situación y de su potencial de grave deterioro.
En consecuencia, el Consejo de Seguridad ya ha condenado al fracaso la misión del nuevo Enviado Personal del Secretario General de la ONU para el Sáhara Occidental, el Sr. Staffan de Mistura, socavando así gravemente las perspectivas de reactivación del proceso de paz, perpetuando el estancamiento reinante y dejando la puerta abierta a una mayor escalada y tensión en la región.
Ante la reiterada inacción del Consejo de Seguridad, el pueblo saharaui, que optó por una solución pacífica durante tres décadas, afirma, alto y claro, que hoy no le queda más remedio que continuar e intensificar su legítima lucha armada para defender la soberanía de su país y garantizar el ejercicio de su derecho inalienable e innegociable a la autodeterminación y la independencia.
En este contexto, de acuerdo con la decisión de reconsiderar su participación en el proceso de paz de la ONU en el Sáhara Occidental con fecha de 30 de octubre de 2019, el Frente POLISARIO planea tomar medidas prácticas con respecto a su participación en el llamado “proceso político”, así como la presencia y operación de los observadores militares de la MINURSO desplegados en los Territorios Liberados de la República Saharaui.
El Frente POLISARIO reafirma que la única vía realista y practicable para lograr una solución pacífica, justa y duradera a la descolonización del Sáhara Occidental es permitir que el pueblo saharaui ejerza libre y democráticamente su derecho inalienable y no negociable a la autodeterminación y la independencia, de acuerdo con los preceptos de la legalidad internacional y las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas y la Unión Africana.
A este respecto, el Frente POLISARIO recuerda los buenos oficios conjuntos de las Naciones Unidas y la Unión Africana que culminaron en el Plan de Arreglo, que fue aceptado por ambas partes, el Frente POLISARIO y Marruecos, en agosto de 1988 y aprobado por el Consejo de Seguridad en sus resoluciones 658 (1990) y 690 (1991), adoptadas por unanimidad, por las que el Consejo estableció la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum del Sáhara Occidental (MINURSO).
El Plan de Arreglo sigue siendo el único acuerdo aceptado entre las dos partes y, por lo tanto, el Frente POLISARIO sólo participará en un “proceso político” basado en la reactivación del Plan de Arreglo, de conformidad con la resolución 690 (1991), en la que el Consejo de Seguridad expresó su pleno apoyo a los esfuerzos del Secretario General para la organización y la supervisión, por las Naciones Unidas en cooperación con la Organización de la Unidad Africana, de un referéndum para la libre determinación del pueblo del Sáhara Occidental.
El Frente POLISARIO recuerda además que el alto el fuego de 1991 es parte integrante del Plan de Arreglo de la ONU-OUA. Por lo tanto, no es un fin en sí mismo, sino un medio para crear las condiciones de seguridad necesarias para la celebración de un referéndum libre y justo que permita al pueblo del Sáhara Occidental ejercer su derecho inalienable a la autodeterminación y la independencia sin restricciones militares o administrativas.
Por tanto, el Frente POLISARIO declara claramente que no habrá un nuevo alto el fuego mientras el Estado ocupante de Marruecos persista, con total impunidad, en sus intentos de imponer por la fuerza un hecho consumado colonial en los Territorios Ocupados de la República Saharaui y de obstruir el referéndum de autodeterminación del pueblo del Sahara Occidental.