ntv.de.- El Sáhara Occidental se considera la última colonia de África. Casi 50 años después de la retirada de España, Marruecos ocupa ahora dos tercios del territorio. El pueblo del Sáhara Occidental, los saharauis, llevan décadas luchando por un referéndum y un Estado propio con su frente de liberación, el Polisario. Sidi Omar, embajador del Polisario ante las Naciones Unidas, explica en una entrevista por qué podría aumentar la violencia en el conflicto del Sáhara Occidental y por qué él y los saharauis han perdido la fe en la ONU y también en países como Alemania.
ntv.de: El 27 de febrero de 1976, el Polisario proclamó la República Árabe Saharaui Democrática. Hoy, casi 46 años después, este Estado sigue sin ser reconocido internacionalmente por la mayoría. ¿Cuáles son los motivos?
Sidi Omar: La razón principal es la actual ocupación ilegal de partes de la República Saharaui por parte de Marruecos. Cuando España abandonó su antigua colonia, el Frente Polisario proclamó la República Árabe Saharaui Democrática, que fue reconocida inmediatamente por varios Estados. La República Saharaui no es miembro de las Naciones Unidas, pero es miembro de pleno derecho y fundador de la Unión Africana.
¿Cuál es la situación de los saharauis en este momento, especialmente en la parte ocupada por Marruecos?
Muchos saharauis han tenido que huir. Han sido perseguidos por las fuerzas marroquíes y bombardeados con bombas prohibidas internacionalmente como el napalm. Menos de la mitad de la población ha permanecido en los territorios ocupados. Son objeto de una represión constante por parte de las autoridades marroquíes. El Sáhara Occidental es actualmente la mayor prisión del mundo, ya que está sellada y no se permite la entrada de observadores y medios de comunicación internacionales.
La mayoría de los saharauis que han huido viven en la vecina Argelia. ¿Cuál es la situación allí?
Los saharauis han podido construir instalaciones vitales, así como escuelas y hospitales en los campos de refugiados, gracias a la generosidad de Argelia y a la ayuda de la comunidad internacional. Cualquiera que haya visitado estos campamentos puede confirmar que son unos de los mejor organizados y autogestionados del mundo.
Desde 1991, la misión de la MINURSO de las Naciones Unidas se encarga de facilitar el alto el fuego y el referéndum en el Sáhara Occidental. El referéndum aún no se ha celebrado, y el alto el fuego se ha levantado desde entonces. ¿Cómo puede explicar esto?
Evidentemente, la misión de la ONU, la MINURSO, no ha sido capaz de cumplir su mandato en casi 30 años. Principalmente por la política marroquí, pero desgraciadamente también por la inacción del Consejo de Seguridad de la ONU, que había creado esta misión con un mandato muy claro y preciso. La ruptura se produjo el 13 de noviembre de 2020, cuando Marruecos rompió el alto el fuego en la parte sur del Sáhara Occidental y atacó a un grupo de civiles saharauis que protestaban pacíficamente contra la ocupación marroquí y el saqueo masivo de los recursos saharauis. A lo largo del infame Muro de la Vergüenza que Marruecos ha levantado en el Sáhara Occidental, siguen produciéndose enfrentamientos militares entre las dos partes.
¿Espera un aumento de la violencia?
Todo es posible. Los saharauis nunca hemos utilizado la violencia por la violencia. La primera guerra se nos impuso en 1975, cuando Marruecos ocupó nuestra tierra. La invasión de noviembre de 2020 fue otro momento en el que nos vimos obligados a tomar las armas. Es responsabilidad del Consejo de Seguridad de la ONU, que es el principal órgano de la ONU responsable de la paz y la seguridad internacionales, intervenir realmente y presionar a Marruecos para detener esta nueva guerra. Por lo demás, desgraciadamente, las guerras tienen su propia dinámica y tienden a intensificarse.
¿Cuál es el papel de la Unión Europea en este conflicto? Ha concluido un acuerdo con Marruecos sobre la pesca en las costas del Sáhara Occidental sin hablar con los saharauis. El Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas declaró inválido el acuerdo.
Aquí se da más importancia a los intereses económicos que a los derechos. Marruecos y el Sáhara Occidental son territorios separados e independientes. Nadie puede disponer o utilizar los recursos sin el consentimiento de los saharauis, que están representados por el Frente Polisario. Esto es hipocresía. No se puede decir, por un lado, que se apoyan los esfuerzos de Naciones Unidas para una solución pacífica y duradera en el Sáhara Occidental y, al mismo tiempo, suministrar munición a Marruecos. Cualquiera que llegue a un acuerdo con Marruecos sobre los recursos del Sahara Occidental está apoyando legal y políticamente la ocupación del Sahara Occidental.
¿Qué papel juega Alemania en el conflicto del Sahara Occidental?
En diciembre de 2020, Alemania convocó una reunión del Consejo de Seguridad para debatir el conflicto del Sáhara Occidental. Como resultado, Marruecos se enfureció y rompió efectivamente las relaciones diplomáticas con Alemania. Ese fue un ejemplo de cómo Alemania realmente trabajó para hacer avanzar el proceso del Sahara Occidental. Pero lamentablemente eso no se mantuvo con un nuevo gobierno. Pero seguimos esperando que Alemania, con su peso en Europa y en la escena internacional, siga trabajando como un país comprometido con la democracia, el Estado de Derecho y un papel más activo de las Naciones Unidas en la resolución pacífica de los conflictos.
¿Qué espera en un futuro próximo? ¿Ve usted alguna posibilidad realista de que los saharauis acaben consiguiendo sus derechos?
El enviado especial de las Naciones Unidas, Staffan de Mistura -con más de 40 años de experiencia en las Naciones Unidas- ha recorrido la región y se ha reunido con los representantes de Marruecos, la República del Sáhara y los países vecinos de Argelia y Mauritania. Ahora estamos esperando su próximo movimiento. Expresó la voluntad de las Naciones Unidas de seguir trabajando por una solución pacífica, pero, por supuesto, al mismo tiempo nos reservamos el derecho a defendernos. Hemos perdido la confianza en las Naciones Unidas y hemos visto un doble rasero en diferentes partes del mundo. No estamos dispuestos a esperar más tiempo a que la ONU haga algo.
Pero ustedes, los saharauis, el Polisario, ¿tienen otra opción que esperar?
En la práctica, el problema es que los saharauis están trabajando en la paz mientras que Marruecos está comprometido con el proceso. Estamos dispuestos a participar en cualquier proceso pacífico serio dirigido por las Naciones Unidas y la Unión Africana. Pero si no es así, no tenemos más remedio que continuar nuestra lucha.
