Ante la decisión del gobierno español de asumir la postura de Marruecos de no respetar el derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui, el BNG afirma:
- Que la postura del gobierno español es una traición al pueblo saharaui, está cediendo a los intereses de Marruecos y va en contra de todos los acuerdos adoptados hasta ahora por las instituciones internacionales, que se han pronunciado unánimemente a favor del derecho del pueblo saharaui a ejercer su derecho a la autodeterminación, mediante un referéndum entre su población.
- Que la postura del gobierno español significa legitimar la ocupación por parte de Marruecos, la represión, las violaciones de los derechos humanos y el robo de las riquezas existentes en el territorio saharaui. También demuestra que la política exterior del gobierno español está claramente alineada con las posiciones de EEUU e Israel, dos estados conocidos por su política imperialista de agresión a otros pueblos y de apoyo a regímenes antidemocráticos, como la monarquía marroquí.
- Esta decisión agrava la tensa situación en una región en la que la provocación de Marruecos en noviembre de 2020 provocó la reanudación de la guerra entre los ejércitos saharaui y marroquí.
- Que esta posición implica la asunción de parte y, por tanto, impide que el Estado español juegue un papel en el proceso de descolonización, basándose en la Carta de las Naciones Unidas y en los acuerdos de descolonización de la última colonia existente en el continente africano.
- Que esta decisión es un ejercicio de cinismo inaceptable, porque mientras exigen la soberanía para Ucrania frente a la invasión rusa, niegan este derecho al Sáhara Occidental y al pueblo saharaui; anteponiendo los intereses económicos y geoestratégicos a los derechos de los pueblos y al respeto de los derechos humanos.
- El BNG exige al gobierno español que rectifique su postura y que, en consecuencia, defienda el derecho del pueblo saharaui a ejercer su derecho a la autodeterminación mediante un referéndum.
El BNG muestra una vez más su firme apoyo al pueblo saharaui, y a su único representante legítimo, el Frente Polisario, en su lucha contra la ocupación militar y por el pleno ejercicio del derecho a la autodeterminación y la independencia.