MADRID – La ex ministra de Asuntos Exteriores española, Arancha González Laya, afirmó ayer martes que Marruecos realizó «escuchas» el año pasado durante la crisis diplomática con Madrid, provocada por la recepción en España del presidente saharaui, Brahim Ghali, por motivos médicos.
«Todo sirvió en aquel momento para enfangar una decisión de carácter humanitario haciaun ciudadano español (Brahim Gali), que necesitaba una ayuda inmediata», dijo Arancha González Laya, que dejó el Gobierno español tras una remodelación en julio de 2021, en una entrevista publicada por el diario El Periódico de España.
«Y cuando digo todo, quiero decir todo: escuchas, denuncias, campañas, y sobre todo campañas de prensa», añadió, al ser preguntada por el hackeo, revelado a principios de mayo por Madrid, de los teléfonos de algunos miembros de su Gobierno en la primavera de 2021 durante la crisis diplomática entre ambos países.
El Gobierno español ha asegurado que estos hackeos mediante el software de la entidad sionista Pegasus fueron un «ataque externo», y muchos medios de comunicación españoles se han referido a la implicación de Rabat.
La llegada a España, en abril de 2021, de Brahim Ghali para ser tratado de Covid había provocado una grave crisis diplomática con Rabat. Arancha González Laya había indicado en 2021 que la hospitalización del presidente saharaui en España era «un gesto hacia una persona que estaba en un estado de salud crítico».
Pegasus permite, una vez instalado en un teléfono móvil, acceder a la mensajería, los datos o activar el dispositivo a distancia para capturar sonido o imágenes.
Según la ONG Amnistía Internacional, este software podría haber sido utilizado para hackear hasta 50.000 teléfonos móviles en todo el mundo.
A modo de recordatorio, las agencias de noticias y los periódicos internacionales, entre ellos «The Guardian», «Washington Post» y «Le Monde», revelaron, en julio de 2021, un escándalo de espionaje a gran escala que afectó a políticos, incluidos jefes de Estado, periodistas y activistas de todo el mundo, a través del software de espionaje Pegasus fabricado por la empresa sionista NSO. Marruecos es uno de los países señalados para utilizar el software.