Madrid – Tres funcionarios españoles han decidido romper el silencio y revelar la «masacre» y «errores de cálculo» cometidos por las autoridades marroquíes durante la represión violenta de inmigrantes africanos el 24 de junio de 2022, quienes intentaban acceder al enclave español de Melilla.
Testimonios Anónimos y Denuncias
Un funcionario del CNI, un ejecutivo del Ministerio del Interior y un miembro de la Guardia Civil, hablaron con la prensa y con la fundación PorCausa para relatar los errores que llevaron a la tragedia. Los tres funcionarios, que prefirieron permanecer en el anonimato, señalaron la intención de Marruecos de demostrar control ante el gobierno español como uno de los errores clave.
La represión ocurrió un año después de la crisis diplomática entre Madrid y Rabat, en un intento por parte de Marruecos de reafirmar su colaboración en temas migratorios con España. Sin embargo, la gestión de la situación resultó en una violencia desmesurada, dejando un saldo de 23 muertos según cifras oficiales marroquíes, aunque organizaciones independientes elevan esa cifra a entre 37 y más de 100.
Contexto y Consecuencias
Los funcionarios españoles destacaron que muchos de los inmigrantes el 24 de junio de 2022 eran de Sudán y no de los países subsaharianos vecinos, lo cual agravó la situación al no tener estos una zona de retirada cercana. La presión excesiva por parte de los gendarmes marroquíes, incluyendo la confiscación de alimentos y agua, exacerbó la tragedia.
Testimonios adicionales indican que los gendarmes marroquíes emplearon fuerza excesiva, utilizando porras y lanzando bombas lacrimógenas en áreas cerradas, violando normas internacionales. Estas acciones desencadenaron la tragedia que tuvo lugar en la frontera entre Nador y Melilla.
Exigencias de Justicia y Responsabilidad
En Madrid, organizaciones de inmigrantes y movimientos antirracistas se congregaron en la Plaza Callao para exigir que España y Marruecos asuman responsabilidad por las muertes y desapariciones ocurridas el 24 de junio de 2022. Al grito de «¡Melilla, hermanos, no nos olvidamos!», los manifestantes recordaron a las víctimas, cuyos familiares aún buscan respuestas y justicia.
Denunciaron la impunidad de los hechos, citando la falta de investigación adecuada tanto por parte de Marruecos como de España. Una nueva investigación por varias ONG ha concluido que los hechos no fueron un accidente, sino parte de una estrategia deliberada de las autoridades de ambos países para manejar la crisis migratoria.
Conclusión y Peticiones a la UE
El partido español Podemos ha solicitado a la Comisión Europea que investigue la tragedia, subrayando la necesidad de verdad, justicia y reparación para las víctimas. Dos años después de los hechos, las ONG y representantes políticos insisten en que se esclarezcan las responsabilidades y se eviten futuras tragedias similares en las fronteras europeas.
Las ONG han remarcado que las autoridades de la UE, que apoyan políticamente y económicamente a Marruecos y España en temas migratorios, también tienen responsabilidad en estos hechos. Las demandas de justicia y rendición de cuentas continúan, mientras las familias de las víctimas esperan respuestas y una resolución que haga justicia a sus seres queridos.
