Argel (Argelia) – El ministro de Asuntos Exteriores de Argelia, Ahmed Attaf, mantuvo una reunión bilateral este martes con el enviado personal del secretario general de las Naciones Unidas para el Sáhara Occidental, Staffan De Mistura. Según un comunicado oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores, el encuentro se centró en los esfuerzos internacionales por reactivar el proceso político destinado a alcanzar una solución que garantice el derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui. Este tema se discutirá en el Consejo de Seguridad de la ONU durante el mes de octubre.
Reactivación del proceso político
La reunión entre Attaf y De Mistura tuvo lugar en un contexto de creciente expectativa internacional sobre la resolución del conflicto del Sáhara Occidental, que ha perdurado durante décadas. Según el comunicado emitido tras el encuentro, el jefe de la diplomacia argelina reiteró el firme compromiso de Argelia con la descolonización de esta región y la defensa del derecho inalienable del pueblo saharaui a decidir su propio futuro.
El conflicto, que enfrenta a Marruecos y al Frente Polisario desde mediados de los años setenta, ha sido objeto de múltiples esfuerzos diplomáticos sin una solución definitiva. Mientras Marruecos propone un plan de autonomía bajo su soberanía, el Frente Polisario, apoyado por Argelia, defiende el derecho de autodeterminación mediante un referéndum, posición que también es respaldada por resoluciones de la ONU.
Los cuatro principios de Argelia para la resolución del conflicto
Durante la conversación, el ministro Ahmed Attaf expuso a De Mistura los cuatro principios fundamentales que, según Argelia, deben guiar cualquier iniciativa seria para resolver el conflicto del Sáhara Occidental. El primero de estos principios es que la cuestión del Sáhara Occidental es esencialmente un tema de descolonización, en línea con las doctrinas establecidas por las Naciones Unidas desde mediados del siglo XX. Este enfoque coloca el conflicto dentro del marco del derecho internacional que busca poner fin a los vestigios del colonialismo en el mundo.
El segundo principio, estrechamente ligado al primero, subraya que la resolución del conflicto depende del ejercicio del derecho a la autodeterminación por parte del pueblo saharaui. Esto implica que cualquier solución debe incluir la posibilidad de que los saharauis decidan, a través de un referéndum o proceso similar, si desean la independencia o algún tipo de relación con Marruecos.
En tercer lugar, Attaf dejó claro que el plan de autonomía propuesto por Marruecos no puede ser considerado una solución viable. El ministro argumentó que dicho plan contradice directamente el derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación, ya que no ofrece una opción real de independencia y, por tanto, no responde a las demandas internacionales de descolonización y respeto a los derechos humanos.
Finalmente, el cuarto principio expuesto por Argelia es que el conflicto del Sáhara Occidental solo puede resolverse mediante negociaciones directas entre las dos partes en conflicto: el Reino de Marruecos y el Frente Polisario. Attaf insistió en que cualquier mediación o iniciativa internacional que excluya a una de las partes carecerá de legitimidad y no conducirá a una paz duradera en la región.
Una solución pendiente de la comunidad internacional
El encuentro entre Attaf y De Mistura se produce en un momento crucial, ya que el Consejo de Seguridad de la ONU revisará la situación del Sáhara Occidental en las próximas semanas. Las deliberaciones en el Consejo podrían influir en el futuro de la MINURSO, la misión de la ONU en el territorio, cuyo mandato ha sido renovado anualmente desde su creación en 1991. La misión, destinada a supervisar un eventual referéndum de autodeterminación, sigue en punto muerto debido a la falta de consenso entre las partes involucradas.
Argelia, en su papel de observador oficial del proceso de descolonización del Sáhara Occidental, ha reiterado en múltiples ocasiones su apoyo incondicional al Frente Polisario y a la celebración de un referéndum que permita al pueblo saharaui decidir su futuro. En contraposición, Marruecos ha tratado de consolidar su control sobre la región, proponiendo un plan de autonomía que no contempla la independencia, lo que ha generado tensiones no solo en la región del Magreb, sino también a nivel internacional.
La reunión entre el ministro Ahmed Attaf y Staffan De Mistura refuerza el papel de Argelia como un actor clave en la búsqueda de una solución al conflicto del Sáhara Occidental. Argelia sigue abogando por una solución basada en el derecho internacional y los principios de autodeterminación, al mismo tiempo que critica el plan de autonomía de Marruecos como insuficiente para resolver una disputa que ha durado casi medio siglo.
El futuro del conflicto sigue dependiendo de las negociaciones directas entre Marruecos y el Frente Polisario, con el apoyo de la comunidad internacional. En este sentido, las próximas discusiones en el Consejo de Seguridad podrían ser determinantes para el avance de una solución que garantice la paz y la estabilidad en la región del Sáhara Occidental.