El TJUE refuerza la protección del sector europeo del tomate y reafirma la diferenciación entre Marruecos y el Sáhara Occidental

El TJUE reafirma la distinción entre Marruecos y el Sáhara Occidental, excluyendo productos saharauis de las concesiones arancelarias a Marruecos y exigiendo etiquetado de origen. FEPEX y EUCOFEL demandan su implementación para proteger al sector europeo del tomate.

El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) dictó el 4 de octubre de 2024 dos sentencias fundamentales que no solo fortalecen la protección del sector agrícola europeo, sino que también reiteran la distinción jurídica entre Marruecos y el Sáhara Occidental. Estas decisiones establecen que los productos originarios del Sáhara Occidental no pueden beneficiarse de las preferencias arancelarias concedidas a Marruecos bajo el Acuerdo de Asociación entre la UE y el país norteafricano.

Reconocimiento del Sáhara Occidental como territorio diferenciado

El TJUE subraya en sus sentencias que el Sáhara Occidental y Marruecos son territorios separados y distintos según el derecho internacional. Esta diferenciación es clave, ya que los productos agrícolas y pesqueros del Sáhara Occidental no pueden incluirse automáticamente en los acuerdos comerciales firmados con Marruecos sin el consentimiento expreso del pueblo saharaui. Este principio legal refuerza la obligación de la UE de respetar el estatus especial del Sáhara Occidental y de garantizar que sus recursos no se exploten en condiciones que favorezcan la ocupación marroquí.

Exclusión de preferencias arancelarias y etiquetado de origen

Las sentencias establecen dos medidas principales:

  1. Exclusión de las preferencias arancelarias: A partir del 4 de octubre de 2025, los productos agrícolas del Sáhara Occidental, como el tomate, estarán sujetos a un régimen aduanero distinto, incluyendo la aplicación de derechos «ad valorem» y precios de entrada ajustados. Esto elimina el acceso privilegiado que estos productos tenían bajo las concesiones arancelarias otorgadas a Marruecos.
  2. Identificación obligatoria del origen: Los productos originarios del Sáhara Occidental deberán indicar claramente su procedencia en todas las etapas de su comercialización, tanto en la importación como en su venta al consumidor. Esta medida busca garantizar la transparencia y permitir a los consumidores europeos tomar decisiones informadas.

Reunión de FEPEX y EUCOFEL con la Comisión Europea

Ante la gravedad de la situación, responsables de la Federación Española de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas (FEPEX) y de la Asociación de Frutas y Hortalizas de Europa (EUCOFEL) se reunieron en Bruselas con la Dirección General de Agricultura de la Comisión Europea. Liderados por Juan Jesús Lara, presidente del Comité de Tomate de FEPEX, los representantes demandaron la implementación rigurosa de las sentencias del TJUE.

Durante la reunión, se destacó cómo la entrada de productos saharauis bajo condiciones privilegiadas ha contribuido al declive del sector del tomate europeo. Entre 2014 y 2024, la producción de tomate fresco en España cayó un 30,71%, mientras que las importaciones de tomates marroquíes y saharauis crecieron un 42,5%, desplazando a los productos locales.

Deficiencias en el acuerdo UE-Marruecos

El Protocolo Agrícola del Acuerdo UE-Marruecos, que incluye salvaguardas para proteger a los productores europeos, ha sido criticado por su ineficaz implementación. La falta de control sobre el origen de las importaciones y la manipulación de los precios de entrada han agravado la competencia desleal en el mercado europeo.

Demandas del sector productor

FEPEX y EUCOFEL plantearon tres prioridades:

  1. Aplicación estricta de las sentencias del TJUE, excluyendo los productos saharauis de las concesiones arancelarias y garantizando controles efectivos del origen.
  2. Revisión del acuerdo comercial UE-Marruecos, con ajustes en los precios de entrada y limitaciones temporales a las importaciones marroquíes mientras no se logren condiciones equitativas.
  3. Mayor transparencia y cooperación, estableciendo mecanismos claros para supervisar las importaciones y proteger la sostenibilidad del sector agrícola europeo.

Implicaciones legales y comerciales

Las sentencias del TJUE no solo benefician al sector agrícola europeo, sino que también tienen profundas implicaciones políticas. Al reafirmar que Marruecos y el Sáhara Occidental son territorios distintos, la UE se alinea con el derecho internacional y refuerza su compromiso con la autodeterminación del pueblo saharaui.

Esta diferenciación envía un mensaje claro a los actores comerciales y políticos: cualquier acuerdo que incluya al Sáhara Occidental debe contar con el consentimiento expreso de su población. Además, establece un precedente para otras disputas similares en el ámbito comercial y de recursos naturales.

En conclusión, las decisiones del TJUE marcan un paso adelante tanto para la protección del sector agrícola europeo como para la defensa de los derechos del pueblo saharaui, reforzando el principio de que los recursos de un territorio ocupado no pueden ser explotados en beneficio de la potencia ocupante.