
ADÍS ABEBA (Etiopía), 7 de septiembre de 2025.– El presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) y secretario general del Frente POLISARIO, Brahim Gali, reafirmó en su intervención ante la Segunda Cumbre CARICOM–Unión Africana que el ejercicio del derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui constituye una parte inseparable del proceso de descolonización en África.
El mandatario saharaui subrayó que «no se puede hablar de un África libre y próspera mientras haya un pueblo privado de su libertad y de su derecho de decidir su futuro», en alusión a la situación que vive el Sáhara Occidental bajo ocupación marroquí.
Un discurso en defensa de la justicia histórica
En su alocución ante jefes de Estado, de Gobierno y altos responsables internacionales, entre ellos el secretario general de la ONU, António Guterres, y los máximos representantes de la Unión Africana y CARICOM, Brahim Gali destacó el carácter histórico del encuentro:
«Esta Cumbre África-Caribe es verdaderamente histórica. Compartimos un legado común de lucha, y una memoria colectiva marcada por el sufrimiento causado por el colonialismo, la esclavitud y la ocupación. No se trata únicamente de un encuentro diplomático, sino de una manifestación viva de la voluntad de nuestros pueblos por construir un futuro basado en la justicia, la dignidad y la solidaridad transcontinental».
El presidente saharaui recalcó la necesidad de que las demandas de justicia histórica y reparación se conviertan en políticas concretas, capaces de traducirse en resultados tangibles para los pueblos africanos y caribeños.
África y el Caribe: alianza estratégica
Gali puso en valor la proclamación de la Unión Africana que declaró 2025 como el “Año de la Justicia para los africanos y los afrodescendientes a través de la reparación”, y recordó el Memorando de Entendimiento firmado en septiembre de 2024 entre la UA y CARICOM, que sienta las bases de una asociación en áreas como el comercio, la educación, la salud, la cultura y la conectividad aérea y marítima.
«Tendemos nuestras manos a nuestros hermanos del Caribe —este admirable conjunto de naciones que representa y debe seguir siendo una zona de paz y estabilidad— para forjar juntos una alianza sólida que reivindique nuestro pasado y construya un futuro más justo para nuestras generaciones venideras».
El Sáhara Occidental como prueba de coherencia
En este marco, Gali señaló que el caso del Sáhara Occidental constituye un desafío central a la coherencia de los principios africanos de libertad, justicia y autodeterminación:
«Permitir al pueblo saharaui ejercer su inalienable derecho a la autodeterminación y plena soberanía sobre la totalidad de su territorio nacional es parte inseparable del proceso de descolonización en el continente africano».
El discurso concluyó con un llamamiento a reforzar la unidad y solidaridad entre África y el Caribe, subrayando que solo desde la cooperación transcontinental será posible erradicar definitivamente los vestigios del colonialismo y abrir el camino a un futuro de justicia y dignidad compartida.
«¡Viva la unidad y la solidaridad entre los pueblos de África y el Caribe!», proclamó el presidente saharaui.





