
El embajador de Argelia en Lisboa declaró hoy que su país apoya los esfuerzos del enviado especial del Secretario General de la ONU para el Sáhara Occidental y rechaza «los intentos de asociarlo» al contencioso entre Marruecos y el Frente Polisario.
expressodasillas.cv.- «La desenfrenada propaganda engañosa, que intenta por todos los medios implicar a Argelia en un conflicto entre un Estado ocupante y un movimiento de liberación nacional, no puede hacer olvidar que el territorio del Sáhara Occidental está inscrito desde 1963 en la lista de territorios no autónomos de Naciones Unidas, y que es el último territorio del continente africano al que no se le ha concedido un estatuto definitivo según la legalidad internacional», declaró a Lusa el nuevo embajador argelino en Lisboa, Chakib Rachid Kaid.
«Argelia seguirá apoyando los esfuerzos del enviado especial del Secretario General para el Sáhara Occidental, Staffan de Mistura, en la búsqueda de una solución justa y duradera que pueda restablecer la paz y la estabilidad en esa parte del mundo», añadió Kaid, que sustituyó recientemente en el cargo a Abdelmadjid Naamoune.
El diplomático respondía así a unas declaraciones anteriores del embajador de Marruecos en Portugal, Othmane Bahnini, en las que alegaba que el 16º congreso del Frente Polisario, celebrado del 13 al 22 de enero, tenía como objetivo «esencial alimentar la propaganda del Polisario y de sus milicias apoyadas por Argelia».
En el comunicado final del congreso, el Polisario indicó que había decidido «apoyar incondicionalmente» la propuesta de la dirección reelegida de Brahim Ghali de «reanudar la lucha armada» contra Marruecos, poniendo fin a los acuerdos de alto el fuego de 1991, señalando que éste es ahora el «marco político y operativo para tratar el proceso de paz en la ONU».
En la respuesta enviada a Lusa, el diplomático argelino afirma que «la larga lucha del pueblo saharaui desde 1975, dirigida por su único representante, el Frente Polisario, tiene como objetivo último el respeto de la legalidad internacional».
Este respeto, argumentó, «sólo puede materializarse mediante la organización de un referéndum de autodeterminación bajo la supervisión de las Naciones Unidas apoyadas por su misión para la organización de un referéndum en el Sáhara Occidental (MINURSO), creada por la resolución 690 del Consejo de Seguridad el 29 de abril de 1991, tras la aceptación de las propuestas de resolución por Marruecos y el Frente Polisario el 30 de agosto de 1988».
Desde entonces, argumentó Kaid, todas las iniciativas diplomáticas en el seno de Naciones Unidas y de la OUA/UA han resultado «vanas», debido a la «intransigencia» de Marruecos, que desde entonces «ha intentado forzar su aprobación para imponer su ‘plan de autonomía’ como única base para resolver la cuestión del Sáhara Occidental».
«Este ‘plan de autonomía’, que oculta los inmensos esfuerzos realizados por la comunidad internacional para encontrar una solución viable y equitativa, no deja lugar a la organización de un referéndum en el Sáhara Occidental bajo la supervisión de Naciones Unidas», mantuvo.
La antigua colonia española está considerada como «territorio no autónomo» por la ONU, a pesar de que Rabat controla cerca del 80% de este territorio casi desértico de 266.000 kilómetros cuadrados.





